El Caribe es uno de los lugares del mundo donde más se practica la videncia y la magia, los lugareños están acostumbrados a leer su predicción cada mes de enero en la Tabla de Ifá, y de hecho la esperan como agua de mayo, pues la creencia en las predicciones por aquellas tierras es muy elevada, mucho más que en Europa y América del Norte. En el siguiente artículo presento brevemente varios sistemas adivinatorios que se practican en el Caribe.
Entre los yoruba, origen y pilar de la santería caribeña, la adivinación es una práctica importante y milenaria, una forma de comunicación con los dioses. Los pobladores africanos y afrodescendientes, han desarrollado diversos sistemas que les permiten predecir el futuro y prepararse para posibles desastres. Aquí tienes algunos:
- El Oráculo de Dilogún: es uno de los sistemas adivinatorios más populares de los yoruba, y se basa en las caracolas o conchas marinas. Los yoruba consideran que estas conchas son sagradas, y algunas de ellas son tan antiguas que llegaron al Caribe junto con los esclavos de la época colonial. Este sistema adivinatorio consiste en arrojar dieciséis caracolas sobre una superficie e interpretar la disposición de su caída como un designio de los dioses.
- La Letra del Año: es una predicción elaborada por un grupo de babalaos cubanos, durante los meses de diciembre, todos los años. Durante el ritual, los babalaos sacrifican tres pollos y tres chivos en honor a Elegua, el orisha que abre los caminos, y a Ifá, divinidad de la adivinación; luego, realizan la adivinación a través de un sistema denominado La Tabla de Ifá. La predicción es publicada en enero, y miles de cubanos se acercan para leerla e interpretarla y así descifrar su destino. La Letra del Año es válida para todo el mundo, pero especialmente para Cuba. La Tabla de Ifá es el oráculo más importante de la Regla de Ocha o santería.
- La Regla de Palo Mayombe: este sistema adivinatorio hunde sus raíces en las tribus batúes de las orillas del río Congo. Es interesante señalar que algunos rituales de esta rama religiosa tienen poco de magia blanca, por lo que sus practicantes generan cierto temor, por ejemplo, en el centro de la liturgia reside una nganga o caldero de poder, una especie de cazo en el que se introducen diferentes objetos (palos, hierbas, restos de animales, etc.); se cree que en ella habitan los espíritus de los muertos.
- El Oráculo del Dominó: el dominó es un juego nacido en Europa, pero los esclavos africanos del nuevo mundo lo adaptaron a sus tradiciones adivinatorias. Para realizar la predicción se mezclan bien las fichas y después se distribuyen sobre una mesa con los puntos hacia abajo. El consultante plantea una pregunta al adivino y éste selecciona la ficha que tiene más cerca y la coloca a un lado; para cada pregunta se repite la operación. La interpretación se realiza al final siguiendo algunas pautas: la ficha blanca doble es un mal presagio, pues vaticina traición y engaños, y por ejemplo, las fichas cuatro y cinco anuncian amor y enlaces felices.
- Adivinación con Cocos: el coco está dedicado a Obatalá, creador del hombre y el más sabio de los orishas; este fruto se emplea en diversos rituales y de diferentes maneras, por ejemplo, su agua es utilizada para lavar imágenes de los dioses y preparar brebajes curativos para los enfermos. También pueden utilizarse para invocar a los muertos: el coco debe partirse en cuatro pedazos y colocarse junto a una vela encendida y un recipiente de agua, tras hacer la invocación, el adivino arroja los trozos de coco al suelo e interpreta su significado según queden hacia arriba o abajo.
Para predecir el futuro también utilizan entrañas de animales, espejos, posos de café y el tarot francés o baraja francesa.
Artículos Relacionados
Adivinar el futuro con los posos de café: Menú > Mancias > Cafeomancia
Adivinar el futuro con el tarot francés: Menú > Tarot > Tarot Francés