El signo Aries rige la cabeza de todo nativo de este signo del Zodíaco, que es el órgano director y gestor de todas las órdenes que alcanzan cualquier parte del cuerpo. La regencia de Aries incluye al mismo tiempo la cara (rostro) y todo el sistema de su musculatura.
La regencia de Aries sobre los puntos mencionados es tan fuerte en algunos nativos, que en ocasiones algunos sujetos sufren espasmos y tics nerviosos en esos puntos, ya sea en la cara (en personas muy nerviosas y excitables), como en los músculos, con problemas de tensiones y contracturas.
También el temperamento o naturaleza espontánea inclina a los nativos de Aries a ser muy inquietos e impulsivos. Llevan una energía en su interior que les otorga una enorme vitalidad, y eso les lleva normalmente a ser nativos con grandes ansias de vivir, muy dinámicos y positivos, raramente están tristes. La tendencia de Aries a exponer al mundo su energía y a gastarla les inclina a cansarse y a desgastarse. Lo que otros nativos de distinto signo hacen en horas, Aries puede hacerlo en menos tiempo, pero como es lógico ello conlleva el desgaste propio de la acción.
El exceso de precipitación en determinados momentos, especialmente en situaciones de sobre excitación, les lleva a caer en errores en aquellas cosas que hacen o dicen, después pueden arrepentirse pero ya está hecho. Esta tendencia emocional de Aries debido a su energía, les expone a accidentes localizados frecuentemente en la cabeza y en la cara, por lo que estos puntos del cuerpo son testigos en el transcurso de los años de alguna herida.
El mismo temperamento exaltado y vehemente de Aries le expone a sufrir fiebres, trastornos sanguíneos, hemorragias e infecciones o inflamaciones. En general, se trata de reacciones que pueden aparecer o no, pero en cualquier caso tienden a desaparecer bastante rápido, pues Aries es un signo de tendencia favorable y supera fácilmente las enfermedades.
El nativo característico de Aries tiene un porte atlético y una actitud firme, los gestos amplios y en ocasiones duros. Es nativo de mirar directamente a los ojos, sin dudas, y comunica con sus gestos y postura su animación y dinamismo.
Frecuentemente los nativos de Aries son de cabello oscuro, negro o castaño, de tez blanca, altos y musculosos. Muchos de estos nativos tienden a ser más morenos y vitales que otros, dependiendo de la zona del mundo donde han nacido. Un punto en común en todos los Aries, es que son amantes del sol y por tanto de las temperaturas cálidas, algunos llegan a broncearse en exceso en los meses de verano.
Quienes poseen el ascendente natal en Aries, también gozan de las fuertes tendencias de este signo, por lo que su temperamento es a veces explosivo, comunicativo, muy dinámico y lleno de vitalidad. Esto causa irritación a sus semejantes ya que no comprenden el proceder de Aries; la mayoría de los nacidos en otros signos no son capaces de seguir la estela de Aries. Estos nativos con ascendente en Aries, son por lo general personas con valor y de fuerte inclinación a emprender iniciativas tanto en el trabajo como en negocios. Son individuos de mucho coraje, a veces violentos, capaces de luchar por sus creencias.
Un problema muy común de los nativos con ascendente en Aries, es que se ponen a prueba ellos mismos de forma inconsciente a través de la acción y de la aventura. No tan frecuente es carecer de la perseverancia suficiente, por ejemplo, para terminar asuntos que han comenzado, como estudios, trabajos o tareas.
Como ya he dicho, la parte del cuerpo más débil de Aries es la cabeza, pero ello no queda ahí, pues Aries corre el peligro de tener ciertas enfermedades a lo largo de la vida, o cuanto menos cierta tendencia a albergar molestias del aparato digestivo, calambres, neuralgias, migrañas, delirio, acné, erupciones, fiebres, heridas y agotamientos nerviosos. Los dientes son otro punto que conviene cuidar a fondo ya que forman parte de la cabeza.