La tradición astrológica siempre ha considerado a Cáncer un signo de poca belleza, incluso antiguos textos de célebres astrólogos le atribuyen a Cáncer cierta deformidad corporal. La astrología moderna y científica mantiene, en el fondo, viejas concepciones sobre la clasificación de los signos, no obstante, los tiempos han cambiado y en el último siglo se han visto modificadas muchas opiniones, por lo que aún no considerando a Cáncer un signo de belleza como Libra o Sagitario, parece que la corriente de los astrólogos modernos es retirarle el adjetivo de deforme.
Mi opinión, como astrólogo, es considerar a Cáncer un signo de belleza media, de estatura intermedia (sobre todo los mediterráneos), y de musculatura bien formada pero no excesivamente sólida; no son personas que se identifiquen precisamente por su fuerza física, sino al contrario, más bien la tendencia es de fuerzas algo flojas. Al tiempo que se aprecia en los nativos Cáncer poco garbo en el caminar; no son precisamente los más adecuados para lucirse en las pasarelas de moda.
La mirada de los Cáncer denota dulzura, mucha sensibilidad, desprenden cariño, en algunos casos se aprecia cierto ensueño o languidez. Los ojos acostumbran a ser medianos o grandes, y dejan entrever una gran riqueza de espíritu interior. Incluso hay quien dice percibir en los ojos de Cáncer el instinto maternal, afirmación algo exagerada tal vez, pero… en todo caso, no exenta de cierto realismo.
El pelo del cuerpo es, por lo general, abundante en los hombres Cáncer. Las mujeres también tienen algo más bello que las nativas de otros signos. Las extremidades son fuertes, de piernas más bien largas, en cambio las manos acostumbran a ser pequeñas y delicadas, que pueden dar la impresión de ser manos de pianista.
La zona superior del cuerpo de Cáncer acostumbra a ser ancha y la tendencia es que aumente con el paso de los años, incluso puede que aparezca la clásica prominencia en el abdomen, sobre todo en los hombres. La boca es amplia y en conjunto la cara es más ancha entre las orejas, se les llama personas de cara llena. El color de los ojos varía considerablemente dependiendo del lugar de nacimiento, aún así se dan muchos nativos de ojos claros. El color del cabello varía entre el castaño claro y el negro. Por el conjunto de sus rasgos denotan ser personas de gran sensualidad.
En la mujer Cáncer el cuerpo está bien formado. A diferencia de otros signos, Cáncer no destaca por su belleza, en cambio la mujer Cáncer goza de un encanto seductor y de un aspecto general muy femenino, destacando el busto que habitualmente es de mayor tamaño que en otros signos, también las caderas son algo más voluminosas. Estos atributos atraen al sexo opuesto quien encuentra en la mujer Cáncer, no sólo la pareja para andar el camino, sino en ocasiones la mujer que también ejerce inconscientemente de madre; una combinación que a veces resulta complicada, pero que a muchos hombres les fascina.
En la edad madura o en la jubilación, el sentido hogareño del nativo Cáncer es un tanto peligroso para una vida sana, pues muchos nacidos bajo este signo se dejan llevar por lo fácil y recrearse en la vida sedentaria, en la comodidad del sofá, en lugar de elegir una vida de actividad y practicar algún deporte, o al menos realizar ejercicio físico. El resultado, al cabo de unos años, es que muchos nativos Cáncer aumentan considerablemente de peso y después les resulta difícil o imposible de perder.
La madurez lleva consigo muchos cambios en los nativos Cáncer y no todos son físicos. Aporta equilibrio y armonía en su comportamiento, su psique se hace más estable, los nervios desaparecen o al menos disminuyen, la salud en general está más equilibrada. Todo esto se nota en el aspecto, pues la piel se vuelve algo más sonrosada salvo que se den graves enfermedades. Por otro lado, la vejez da a Cáncer la verdadera paz interior y el sentido de la vida.