Si hay algún signo perezoso a la hora de hacer las maletas o decidir dónde pasar las vacaciones, es precisamente Capricornio. La mayoría de estos nativos son inamovibles, muy a pesar de ser un signo Cardinal dado a la actividad, al movimiento y a la acción directa. En Capricornio se da una cierta pasividad en cuestión de desplazamientos, ya sean cortos o largos, normalmente suele observarse por un exceso de comodidad. Si tenemos en cuenta que Saturno (su regente) estanca y limita, aquí encontramos la naturaleza fundamental, la razón por la que Capricornio se opone internamente a todo lo que signifique un cambio aunque sea momentáneo. La mayoría de las veces, un viaje no es más que una salida de uno o varios días, lo que para Capricornio se traduce en un cambio de hogar y de hábitos, para los que muchos nacidos bajo este signo no están mentalmente preparados.
A un nativo Capricornio dale un hogar confortable, algunas comodidades, valores materiales, joyas, ciertos lujos, incluso superfluos, y sobre todo terrenos, casas, y se sentirá profundamente feliz y satisfecho. Por el contrario, si le pides hacer las maletas, le das prisas con un vuelo de avión o un tren, o peor aún, le pides hacer mil kilómetros con el auto y soportar alguna caravana con los nervios que esto genera, Capricornio se pondrá malo, fatal, será como sacar un pez fuera de su pecera.
Debo añadir que se dan casos totalmente opuestos, en mi consulta he conocido varios nativos Capricornio a quienes no se les caerá el techo encima. Este hecho guarda relación con la configuración del plano astral de su nacimiento, donde varios aspectos y posiciones de planetas enfatizan la tendencia a los viajes, porque aún siendo nativos Capricornio gozan de influencias poderosas de otros signos muy movidos.
Como norma general, a todo nativo Capricornio le interesa más su introspección personal y, por tanto, sumergirse en su mundo de luchas, de superar obstáculos que son imposibles para otros, de elevarse por las cimas profesionales, trepando en la escala social y alcanzando niveles verdaderamente altos a lo largo de la vida, antes que sentarse en el auto y recorrer cientos de kilómetros o ir de aquí a allá a través de medio mundo en aviones, porque otra cosa que Capricornio lleva mal es correr riesgos innecesarios, en cambio asume bien los riesgos profesionales y de negocios. El signo Capricornio da mucha reflexión y prudencia, es un signo de vida interior, y esto es contrario a tomar riesgos para hacer de aventurero. Es, digamos, una mancha entre el comportamiento aventurero de Sagitario y el independiente Acuario.
Un dato relevante a tener presente, es si el nativo Capricornio tiene un ascendente natal viajero, como Sagitario, Cáncer o Géminis, ya que puede dominarle de tal forma que vuele de un lugar a otro conociendo mundo. Se dan nativos Capricornio que sin proponérselo salen de su país y terminan haciendo fortuna lejos de su lugar de nacimiento. En estos casos se dan dos factores, la movilidad del ascendente del nativo y la ambición terrenal y capacidad de lucha de Capricornio.
A Capricornio no le viene nada mal abrirse a la gente y relacionarse, salir, viajar, ver mundo, de ese modo logrará salir de las sombras saturninas que lo domina y ampliará sus horizontes, al tiempo que logrará una mayor perspectiva de las cosas. Con esto conseguirá cambiar algunos puntos de vista, muchos de ellos subjetivos. ¡La vida no consiste sólo en trabajar y enriquecerse!
En el mundo hay una serie de países interesantes donde Capricornio puede sentirse realmente feliz. Estos destinos guardan relación con las atribuciones que la moderna astrología ha concedido a diversos lugares, en base a la comprobación y experiencia. Por mi parte me inclino a recomendar a Capricornio que viaje a Suiza, Grecia y Méjico, son países con una vibración especial acorde a las necesidades de Capricornio.
Otros lugares secundarios pero también recomendables, son: Italia (mitad norte), Irlanda (sobre todo el interior del país y la costa suroeste), Polonia, Brasil (centro y costa de la mitad norte) y Turquía.
Si el nativo Capricornio tiene casa de campo, seguro pasará muchos fines de semana en ella, y dedicará muchas horas en arreglos y cuidados de toda clase, procurando que sus jardines y sembrados crezcan admirablemente. En este supuesto, es recomendable que Capricornio dedique buena parte del tiempo de ocio a los cuidados de su tierra; el contacto de sus manos directamente con la tierra, las plantas y los árboles le beneficiará.