Todo nacido bajo Escorpio es un ser de una psicología fenomenalmente compleja, su naturaleza del elemento Agua lo hace un ser muy sensible, al mismo tiempo dotado de una enorme intuición que, una vez desarrollada, la utiliza fácilmente en su propio beneficio. En cambio, no acostumbra a ser un nativo delicado en sus modos, por lo que con frecuencia resulta algo brusco.
Su fuerza interior es muy grande, así como su fortaleza para superar baches y obstáculos. Conviene saber que Escorpio es un signo muy vital y de una enorme energía, sin embargo, es un signo receptor, capaz de captar cualquier señal que halla a su alrededor, que interpreta y analiza la información, tal vez como ningún otro signo, por lo que se da cuenta de todas las cosas con suma facilidad. A Escorpio se le conoce una virtud singular, es uno de los signos capaz de desentrañar las más oscuras sombras del alma ajena.
Con el niño Escorpio hay que andar con cuidado, porque se puede dañar su sensibilidad fácilmente. Recibe y analiza lo bueno y lo malo, y lo guarda para sí, de forma que aprecia las cosas con rapidez, razón por la que el entorno le puede influir profundamente. Será bueno que los padres sean conscientes de esa sensibilidad y eviten cualquier brusquedad en el trato con el niño Escorpio.
Al niño Escorpio se le deben dar argumentos sólidos acerca de la vida, para que aprenda a definir con claridad lo que es correcto y lo que no, por supuesto se le deben dar ejemplos que deben servir de iconos, para que después el niño Escorpio los tome como puntos de referencia.
Como Escorpio es un signo bastante sabio de nacimiento, aprecia con todo detalle aquello que le imponen como una obligación, reconoce lo que es verdadero de lo falso, de modo que todo lo que se transmita a Escorpio debe contener un fondo de auténtica verdad, ya sea en las palabras o en los hechos. En caso contrario puede darse la circunstancia, que el niño Escorpio adopte modelos de conducta que no se correspondan con lo auténtico.
Con Escorpio el diálogo debe estar por encima de todo. Es importante convencerle mediante las palabras y siempre con un razonamiento lógico, coherente, demostrándole como son las cosas, nunca obligarle hacer nada en contra de su voluntad y mucho menos pegarle, eso podría causar en Escorpio una herida profunda que arrastrará durante tiempo.
De pequeños, algunos nativos Escorpio albergan cierta tendencia a auto lesionarse, sobre todo cuando hay algo que no sale bien. Pueden empeñarse en realizar determinada tarea y poner en ello todo su tesón y sabiduría, pero si por alguna razón el resultado no aparece o no sale como ellos quieren, entonces se enfadan profundamente consigo mismos, lo que puede ser el origen de que se dañen. Conviene recordar que la energía de Escorpio brota de su interior con fuerza y en un momento determinado, esta energía puede ser una rabia endiablada. Precisamente en el signo Escorpio se dan numerosos casos de intento de suicidio.
Escorpio nunca es un signo fácil, así que de pequeño suelen dar muestras de rebeldía, sobre todo en la relación familiar. Esta situación acostumbra a dar un giro al alcanzar una edad tal (catorce, quince años), donde la personalidad se ha desarrollado completamente, y para ello es fundamental la evolución que le provocan los vaivenes de la vida. Escorpio debe someterse a esta transformación interna, para que su vida tome un auténtico significado y comprenda lo que es correcto, para separarlo de aquello que no lo es.
En la medida que el nativo Escorpio evoluciona, deja de aislarse, adquiere conocimientos y experiencias, pierde los miedos en las relaciones con otros nativos de su edad, incluso con personas mayores.
Todos estos detalles deben conocerlos sus padres y familiares más allegados, para evitar que el pequeño Escorpio sea demasiado introvertido y pueda aislarse en exceso.
A un nativo Escorpio es fundamental hablarle con total naturalidad, llevando un diálogo correcto sobre cuestiones auténticas, puesto que por naturaleza es desconfiado. Conviene que no albergue dudas con respecto aquello que se le dice, debe reconocer a sus padres como líderes auténticos, que le dicen la verdad y que son justos con él, sólo así Escorpio aceptará la autoridad y alguna imposición o limitación, porque entenderá que aquello que le dicen es correcto.
No es bueno que el niño Escorpio crezca como hijo único, conviene que se rodee de algún hermano, de no ser así es conveniente que de pequeño se relacione con otros niños de su edad, con los que pueda compartir juegos, estudios e intereses. En caso contrario, el nativo Escorpio pone demasiado celo en su relación con los padres, de los que en ocasiones no se despega, lo que puede ocasionarle un problema para el futuro, al ser excesivamente absorbente y no saber dominar esa tendencia. En cambio, si el nativo Escorpio tiene hermanos, puede ocurrir perfectamente que se convierta en líder, porque Escorpio tiene capacidad de dominio y gobierno sobre los demás.
De mayor, al nativo Escorpio le gusta la paz y la tranquilidad, prefiere un lugar un tanto retirado del bullicio mundano, sin embargo, cuando desea un ambiente festivo sabrá dónde encontrarlo rápidamente; recorrerá la distancia necesaria hasta conseguirlo.
Escorpio preferirá siempre una casa donde se respire paz y armonía, de hecho es un signo que necesita tranquilidad de mayor y no es necesario que su hogar esté cargado de lujos, sino solamente que cuente con los elementos que le transmiten comodidad, y donde Escorpio se encuentre a salvo de cualquier otra influencia externa. Incluso en esto Escorpio es un poco especial, de pequeño necesita muy pronto identificar un lugar, que para él será su “rincón preferido”, donde pueda aislarse, sentirse bien, será su espacio privado a salvo de las miradas de los demás, convirtiéndose ese lugar en su “espacio vital”, al que solamente dejará entrar a determinadas personas.
Escorpio es un padre o madre muy buen defensor de su familia y de sus hijos hasta las últimas consecuencias, no permitirá que los derechos de estos sean atropellados. En cambio, en la relación de pareja acostumbran a darse vaivenes con frecuencia, pero esta situación dependerá, en cierto modo, de quién sea su pareja y cómo se produce la interacción entre ambos, es obvio que habrá que analizar ambos planos natales para comprobar el grado de afinidad.