Piscis es un signo con innumerables cualidades, como la inspiración, la adaptación, la flexibilidad, la interiorización y la sensibilidad. Todos estos atributos naturales son fundamentales para adaptarse a cualquier ambiente, en cualquier lugar del mundo, y hacen que Piscis sea el perfecto profeta en otra tierra, por lo que es típico observar a nativos Piscis en labores de ayuda humanitaria lejos de su tierra natal, ya sea en ONG’s, hospitales o en cualquier otra actividad de ayuda. Sin embargo, su curiosidad y capacidad de movimiento no cesa cuando Piscis se encuentra en el otro extremo del planeta, con frecuencia se siente inducido por una extraña fuerza interior que lo lleva a mudarse de nuevo, a hacer la maleta y a cambiar unos aires por otros, por este motivo se dice de Piscis que es un viajero nato.
Para conocer un poco mejor a Piscis veamos que le diferencia de otros signos viajeros. Sustancialmente el nativo Piscis es muy diferente a Géminis y Sagitario, ambos signos también son muy movidos. Géminis es nervioso y le gusta andar arriba y abajo curioseando y aprendiendo. El segundo, Sagitario, es mucho más aventurero, y le gusta viajar para descubrir. En cambio Piscis es viajero porque necesita cambiar continuamente, hacer ahora una cosa y mañana otra, por eso andará de aquí para allá.
Hoy puede estar en Madrid, luego en Sevilla y mañana se embarcará en un nuevo asunto en América, pero al poco, si las cosas no le resultan como esperaba, cosa probable en este signo, tomará de nuevo el camino y no dudará en cambiar de ciudad. Al fin, el resultado es que aquello que para otros signos representa una auténtica complicación, para Piscis cualquier cambio de lugar es como el maná caído del cielo, significa una oportunidad de enriquecimiento personal, de evolución, y fuente de multitud de nuevas experiencias.
Esta disposición del nativo Piscis no es ni buena ni mala, hay que entenderlo como una característica más del signo, y para que esta actitud resulte beneficiosa, el nativo de Piscis dispone de un tejido mental incomparable, que se aparta generalmente de lo convencional: es sumamente elástico, flexible prácticamente en todo, adaptable como ningún otro, cuestión que sorprende a las personas de su entorno con demasiada frecuencia. A este hecho se dan numerosas excepciones, por ejemplo, que el nativo Piscis tenga un ascendente que lo ancle fuertemente a tierra y mitigue esas ansias de escapismo. En estos casos, unos ascendentes adecuados para Piscis, son: Tauro, Virgo y Capricornio.
Esta actitud cambiante y viajera resulta anormal para la mayoría de signos, pero para Piscis se convierte en una rutina más o menos bajo control, por lo que la disposición a salidas fuera de lo previsible o viajes largos esporádicos se convierten en típicos para Piscis. A los ojos de la familia o de los amigos, Piscis ofrece un carácter de poca constancia, incluso pueden tratarlo de anárquico o indolente. En definitiva, Piscis es de tendencia cambiante e inquieta que se manifiesta por ese carácter viajero, incluso en ocasiones sin un rumbo definido.
Para tener contento a Piscis hay que proponerle salidas por sorpresa, ya sean cercanas o lejanas, da igual, pero nada que esté programado o meditado con anticipación, porque eso corresponde a otros signos que deben tenerlo todo medido. Lo mejor es regalarle los oídos con un viaje a otro país, donde Piscis encuentre un mundo de fantasía a su alrededor, si no se aburre, y no es que Piscis sea infantil por naturaleza, es que Piscis necesita recrear continuamente su costado ideal e imaginativo.
A lo largo de la vida, si Piscis cuenta con suficientes recursos económicos es candidato a dar la vuelta al mundo, en el caso que no pueda darse ese capricho deberá conformarse con alguna salida más cercana. Por poco que pueda el nativo Piscis hará lo posible por ver mundo, y son muchos los que se instalan en otro país aprovechando alguno de los viajes. Si esto último lo desea fervientemente y no consigue realizarlo, albergará en su interior una tremenda frustración que le llevará años olvidar, o quizás no lo olvide nunca.
No hay nada mejor para Piscis que recomendarle un lugar de costa y que se ponga siempre en contacto con el agua del mar, pues aunque pueda parecer una falacia, el agua del mar es para Piscis el alimento del espíritu, y donde mejor se encontrará. También son muy convenientes los viajes por mar en un gran crucero. Si esto no es posible Piscis disfrutará con una salida en una lancha deportiva o en un barco a vela, que por un precio ajustado podrá gozar un día de esta singular aventura.
A la hora de escoger un destino para unas vacaciones, a Piscis debería resultarle bastante simple, basta con que Piscis medite un poco acerca de sus inclinaciones internas, sin programar nada, por supuesto, ya que este signo prefiere las cosas del modo: «aquí te pillo, aquí te mato». Un consejo apropiado a este signo (en el supuesto de que los intereses de otras personas no obstaculicen a Piscis), es que este nativo piense en primer lugar en zonas típicas de costa, y si Piscis es de tierra adentro y no es posible el desplazamiento, lo mejor es que busque cualquier zona bañada por un caudaloso río, lago o embalse, y pasará unos días sumamente agradables. Si el deseo es viajar al extranjero, recomiendo que visite países húmedos y cálidos de cualquier lugar del planeta. Ciertos países europeos son favorables a Piscis: en primer lugar Portugal (este país también es Piscis), a continuación Italia, Grecia, Marruecos, Croacia y Turquía. Otros lugares que despiertan el interés de este nativo son los Países Bajos. En otras zonas del mundo tenemos también países muy interesantes para Piscis, son: Brasil, Méjico, Costa Rica. California y Hawai en USA. Tailandia, Indonesia, Australia y las islas del Pacífico.